Remedios naturales para decir adiós a la fatiga

La fatiga es un trastorno de tipo neurológico que se caracteriza por tener una sensación muy intensa de cansancio que suele ir acompañada de dolores de cabeza, tensión muscular, sensibilidad a la luz entre otras molestias, que impiden la realización de las tareas diarias con normalidad. A continuación te ofrecemos algunos remedios caseros que no debes dudar en probar ante la primera señal de fatiga.

Zumo de cítricos con miel

La combinación de miel de abejas con zumo de limón y de naranja, ofrece una bebida muy energética llena de vitaminas, minerales y antioxidantes. Además cuenta con azúcares naturales que mejoran el rendimiento tanto físico como mental y contribuye a frenar el cansancio provocado por la fatiga.

Los ingredientes que se necesitan para prepararlo son el zumo de seis naranjas, el zumo de medio limón y una cuchara de miel. Se mezclan bien todos los ingredientes y se toma en el desayuna o ante el primer síntoma de fatiga.

Amaranto con leche y miel

Esta combinación es rica en minerales, vitaminas y ácidos grasos esenciales que brindan al organismo mayor energía evitando la sensación de fatiga mental y física.

En este caso se van a necesitan dos cucharas de amaranto, un vaso de leche y dos cucharas de miel. Se introducen en la licuadora todos los ingredientes y se baten hasta conseguir una bebida homogénea. Hay que consumirlo en el desayuno o cuanto aparezca la primera señal de cansancio.

Durazno con leche de soja y germen de trigo

Este remedio además de ser efectivo para luchar contra la fatiga, ayuda a controlar la ansiedad por comer y no aporta muchas calorías. Tiene azúcares de fácil digestión y una elevada concentración de nutrientes esenciales y de antioxidantes que benefician la salud. Por otra parte su valor energético mejora el rendimiento mental y físico y alivia las dificultades para concentrarse y el malestar muscular.

Para su elaboración se deben introducir en la licuadora dos duraznos maduros, un vaso de leche de soja y una cuchara de germen de trigo y procesarlos hasta lograr un batido sin grumos. Hay que consumirlo por la mañana, bien durante o después del desayuno.

Vino con romero y salvia

Esta receta contiene minerales esenciales y sustancias antioxidantes que ayudan a regular los niveles de electrolitos en el cuerpo. Con una ingesta regular se previenen los signos prematuros de la edad y le da mayor energía al organismo.

Se necesitan dos vasos de vino, una cuchara de romero, una cuchara de salvia y dos cucharas de miel. Se ponen en un recipiente que sea resistente al calor todos los ingredientes, exceptuando la miel y se calientan al baño María durante quince minutos.

Transcurrido este tiempo se retira y se deja reposar hasta que alcance una temperatura apta para consumir. Se pasa por el colador y se añaden dos cucharas de miel para tomar una vaso durante la comida y otro durante la cena.