Un elevado ácido úrico dentro del organismo es conocido como hiperuricemia y se produce cuando los niveles superan los 7 mg por dl. Esta sustancia es provocada por la descomposición de las purinas que se producen con ciertos alimentos y que son enviadas a la sangre y que después se eliminan por los riñones.
Hay veces que debido a problemas con la eliminación de las mismas, ya sea porque el organismo no lo remueve correctamente, o porque es excesiva la cantidad, se pueden producir reacciones inflamatorias que llegan a afectar a la calidad de vida de quien lo padece. Como consecuencia aumenta el dolor en las articulaciones aumentando el riesgo de padecer cálculos renales y gota. Por suerte hay remedios naturales que ayudan a que los niveles se mantenga estables. Toma nota.
Infusión de alcachofa
La alcachofa cuenta con ácidos oleico, linoleico y cafeico que cuando es asimilado por el cuerpo, ayuda en la descomposición y en la eliminación de las purinas de la sangre. Sus propiedades diuréticas ayudan a producir orina, algo clave para controlar el ácido úrico elevado.
Los ingredientes que se necesitan simplemente son una alcachofa y medio litro de agua. Para preparar esta infusión hay que lavar bien la alcachofa retirando el tallo con la ayuda de un cuchillo y quitando las hojas exteriores para reservar las que sean más blandas. Se pone en una cacerola el agua y cuando comience a hervir, se añaden las hojas de la alcachofa para dejar que hiervan durante cinco minutos. Después se retira el resultado del fuego y se deja reposar.
Antes de tomarla se debe colar e ingerirla en ayunas y repetir su ingesta a media tarde. Esto debe realizarse durante dos semanas seguidas.
Infusión de cardo mariano
Los antioxidantes del cardo mariano ayudan al buen funcionamiento del hígado que a su vez, promueve la limpieza de la sangre.
Con tan solo dos cucharas de frutos de cardo mariano y una taza de agua, se puede preparar este remedio. Para ello hay que machacar los frutos con ayuda de un mortero mientras se pone a hervir el agua. Cuando llegue a ebullición se añade el cardo mariano y se deja cocer durante cinco minutos. Después se deja reposar durante otros diez minutos y se cuela.
Hay que consumir esta bebida a media mañana y si se desea, también se puede tomar otra taza a media tarde.
Infusión de diente de león
El diente de león tiene propiedades diuréticas y depurativas que son excelentes para reducir los niveles e ácido úrico altos. Los compuestos que tiene ayudan a mejorar el funcionamiento del hígado y de los riñones, además de evitar la retención de líquidos.
Hay que poner cinco gramos de hojas secas de diente de león en una taza de agua hirviendo, tapar el resultado y dejar reposar durante diez minutos. Se cuela y se toman dos tazas al días durante dos semanas.
Infusión de ortiga verde
Esta planta purificadora de la sangre, al ser ingerida en infusión, disminuye la inflamación que provoca la retención de ácido úrico, ya que sus compuestos ayudan a descomponen las purinas y facilitan que los cristales formados en los riñones, se eliminen.
A una taza con agua hirviendo se añaden cinco gramos de ortiga verde y se tapa. Se deja enfriar ligeramente y se cuela antes de consumirla cada mañana en ayunas, durante dos semanas como mínimo.
