El síndrome del abdomen inflamado consiste en sentir hinchazón en esta zona sin una causa aparente. Aunque no se padezca una patología grave, se suele sentir con frecuencia cierta molestia que va varando en función de cada persona, pudiendo ser desde leve hasta limitante. Si es tu caso, vamos a darte algunos remedios caseros para intentar solucionar este problema.
Agua
Existen personas que son propensas a retener líquidos y puede seer debido a muchas causas, desde hormonales, hasta circulatorias, metabólicas o posturales. Puede manifestarse en forma de edema en las extremidades o de inflamación en el estómago.
Y aunque pueda parecer contradictorio, una estrategia muy útil para luchar contra ello es tomar mucha agua, ya que de esta manera se facilita la expulsión de dichos líquidos. Además una correcta hidratación es fundamental para que los órganos funcionen correctamente.
Zumo de jengibre y limón
Estos dos ingredientes atajan de manera directa dos de las causas del hinchazón de estómago. Por una parte el limón tiene un gran poder alcalinizante que evita la acidez de estómago provocada por algunos alimentos. El jengibre por otro lado agiliza la digestión a la vez que es un antinflamatorio muy poderoso.
En la actualidad en los herbolarios existen saquitos de té preparados para su uso, aunque también se puede realizar en casa. En este caso se necesitan cinco cucharas de jengibre fresco, dos litros de agua y dos limones.
Para prepararlo se pica el jengibre y se cortan en tacos finos los limones. Se pone todo en la batidora y se añade agua. Se procesa todo ben y se puede ir tomando a lo largo del día.
Infusión de hinojo
Esta planta es perfecta para este problema siempre que venga provocado por intolerancias o gases, ya que además de deshacer las burbujas de aire, funciona como analgésico, eliminando tanto las flatulencias como los calambres que por lo general las acompañan.
Para su preparación se necesitan dos litros de agua y quince gramos de semillas de hinojo. Se ponen ambos ingredientes en una cacerola y cuando lleguen a ebullición se deja cocer durante quince minutos. Transcurrido este tiempo se cuela y se toman tres tazas al día, una después de cada comida.
Té de manzanilla
Existen pocos remedios que sean más eficaces para los problemas digestivos que la manzanilla, ya que regula el tránsito intestinal, disolviendo los gases, además de acabar rápidamente con el dolor. Si en lugar de comprarla ya preparada quieres elaborarla en tu propia casa necesitarás dos tazas de agua y tres cucharas de hojas de manzanilla.
Pon a calentar el agua y cuando llegue a ebullición, añade la manzanilla. Deja infusionar durante quince minutos antes de colar y consumir. Se puede tomar toda la cantidad que se desee al día, puesto que es una infusión muy respetuosa con el aparato circulatorio.
Prueba primero cómo reacciona el organismo ante cada uno de estos remedios naturales y así podrás decantarte por el que más te beneficie.