La idea de perder la memoria le hace entrar en pánico? No se preocupe: se puede entrenar el cerebro con ejercicios y alimentos desafiantes.
Los alimentos que estimulan la memoria
1. Concentrado de arándanos
Los arándanos son una gran fuente de antioxidantes, y demostraron ser capaces de mejorar la capacidad de memorización. Un estudio reciente, reveló el beneficio potencial de los arándanos para mejorar la memoria en las personas mayores en situación de riesgo de demencia. La mejor manera de aprovechar los beneficios de los arándanos es usar un concentrado de arándano: mezclar 1 cucharada con 4-5 gramos de agua. Una cucharada de concentrado es equivalente a una taza de arándanos, por lo que si no desea comprarlo, puede sustituirlo con la cantidad mencionada de arándanos frescos.
2. Aceite de semillas de calabaza
La alta concentración de ácidos grasos omega-3 que se encuentran en las semillas de calabaza, mejora la función cognitiva y ayuda a prevenir la pérdida de memoria. El aceite de semilla de calabaza es rico en zinc y ayuda al cerebro a formar nueva memoria. Añádalo a ensaladas, verduras a la plancha, o platos de pasta o arroz. E
3. Chips de manzana
Las manzanas, además de sus otros múltiples beneficios, también pueden mantener a raya la enfermedad de Alzhéimer. Para combatir los efectos del envejecimiento en el cerebro, los chips de manzana ayudan a prevenir el declive de un grupo clave de neurotransmisores, protegiendo al cerebro de enfermedades como el Alzhéimer.
Ejercicios que estimulan la memoria
1. Recordar nombres asociados con imágenes
Pase 5 minutos por día relacionando imágenes con los nombres de personas conocidas, para mejorar la memoria visual. Por ejemplo: «Pablo tiene el pelo marrón como una patata, cuando vea el color de una patata voy a recordar su nombre que comienza con Pa«. De esta manera será capaz de asociar un nombre a un rostro y evitar el embarazo de olvidarlo.
2. Yoga para el cerebro
Algunos juegos, como los crucigramas y el ajedrez son ideales, pero el yoga para el cerebro es aún mejor porque se puede hacer en cualquier lugar y no es necesario ningún equipamiento, simplemente apretar los puños. Coloque un dedo sobre el otro, comenzando con el pulgar y el meñique, simultáneamente. La práctica de este ejercicio fortalece las conexiones neuronales existentes y crea otras nuevas. Los estudios también han revelado que el uso de los dedos estimula las terminaciones nerviosas que van directamente al cerebro. Practique este ejercicio durante cinco minutos al día, y se sorprenderá de lo mucho que puede mejorar.
